Tras unos días de vacaciones en Centroeuropa (se ha hecho duro no poder gaviotear), he vuelto a visitar los vertederos de Madrid y Ciudad Real, con resultados dispares. Si bien en el de Pinto ya se aprecia cierto movimiento, en el de Alcázar la presencia de gaviotas de gran tamaño es testimonial, no así las reidoras, que se encuentran en plena migración.
En general, el comportamiento en ambos vertederos es muy similar, con las aves presentes muy temprano en la mañana para luego abandonar el lugar sobre las 10:00h o las 11:00h. Me llama la atención algo curioso: mientras que en Alcázar las gaviotas (tanto pequeñas como grandes) sienten pánico al ser sobrevoladas por los milanos negros, en Pinto las he visto esta mañana reposando en tierra junto a ellos, como dos especies comensales más. A pesar de que en ambos lugares los milanos no atacan a las gaviotas (sólo se limitan a molestarlas para que suelten comida, o para cogerla ellos), esta diferencia de actitudes resulta curiosa.
Larus michahellis adulta, Pinto.
Larus fuscus 3cy H5.2V (teutona de Sönke Martens) en Pinto, una vieja conocida, pues la observé en Alcázar el 30 de marzo de este año.
Juvenil de Larus fuscus.
En Alcázar apenas hay 20 gaviotas sombrías, de todas las edades eso sí, y las dos patiamarillas adultas reproductoras. Las cabecinegras son las protagonistas, con 4 ejemplares muy visibles, 1 3cy y 3 2cy. Hoy en Pinto, además de unas 120 sombrías (2 juveniles y 2 anillas), una patiamarilla adulta y poco más, de momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario